–Aya, los chicos
que pasan miran descaradamente, ¿no?
–Si Nena, los
hombres son muy descarados.
–Pues dice mi madre
que sabiéndolos llevar...
–Eso es lo difícil,
saber por dónde van.
–Mi madre dice que
con padre tuvo mucha suerte, que si no se hubiera ido tan pronto...
–Déjale, que a lo
mejor tenía que irse y liberar muchas cosas.
–No te entiendo
Aya. ¿Qué es lo que tenía que liberar?
–Qué no, a quién,
sería la pregunta.
–¿Qué pasa que mi
padre tenía esclavos?
–No Nena, tenía
esclavas. Una cerca de su cinturón y otra lejos de su corazón.
Fabián Madrid
Más cuadros
parlantes en el blog de Noegéminis.
Esun cuadro que habla por sí solo, aunque el diálogo que le has montado tú, no tiene desperdicio.
ResponderEliminarConcuerdo con Tracy. Tus palabras le ponen diálogo a esos rostros tan expresivos y sonrientes.
ResponderEliminarun abrazo y gracias por sumarte!
=)
Risueña manera de escuchar a las chicas, hablando casi en secreto.
ResponderEliminarSi, que le has dado vida.
Un abrazo :)
Confidencias junto a la ventana. Estoy de acuerdo con todos los comentaristas. La pintura tiene vida propia.
ResponderEliminarBueno, con respecto al diálogo, simpático y divertido, también estoy de acuerdo...
Besos.
Un diálogo casual, donde al parecer, algunas cosas ocultas comienzan a salir a luz...
ResponderEliminarMucha naturalidad, en la pintura y en la escena que muy bien lograste recrear.
Besos!
Gaby*
Esta ventana era otra de mis opciones pero decidí quedarme con la de Dalí.
ResponderEliminarUn diálogo con confidencias que la muchacha quizá no logre entender aún.
Besos.
Leonor
La última frase es magnífica,. Un día la chica la entenderá y verá claro todo lo que su Aya le decía.
ResponderEliminarAbrazos.
La inocencia de la joven frente al saber de la aya, algun día tal vez entienda a que dos mujeres se estaba refiriendo. Agil y ligero este dialogo para una pintura tan expresiva, no podia ser de otra forma.
ResponderEliminarBesos.
una hermosa conversación tras la ventana Fabián!!
ResponderEliminarNo conocía el cuadro, pero me encanta la cara del aya iniciando a la niña en las cosas de la vida que más tarde entenderá...
ResponderEliminarParecía que estabas allí, jeje. Ha sido un diálogo muy divertido e interesante, porque pones los diferentes textos dependiendo de las expresiones de la cara las chicas, eso ha dado mucho juego.
ResponderEliminarUn beso.
Probablemente dirían algo parecido. Has realizado un micro muy inspirado.
ResponderEliminarUn abrazo
Divertida interpretación de lo que pudieran estar haciendo esas mujeres asomadas a la ventana. El aya en su labor educadora, la joven, aprendiendo formándose en las enseñanzas que la vida nos depara. Como el padre, muchos hombres tienen el corazón y el cinturón en sitios muy distantes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Parece que el cuadro fue pintado en base a tu relato, quedó perfecto.
ResponderEliminarMe divirtió mucho ese final que cierra irónicamente el relato.
Un beso.
Hay Fabian ! Que buena inspiración te trajo este cuadro, creo notar un cierto poso de ironia en tus palabras, pero me gusta como el aya alecciona a la joben que tantas ganas de vivir siente...Aunque creo que de momento tendra que conformarse con ver el mundo a traves de la ventana.
ResponderEliminarBesos querido amigo.
Todos me decían que tú habías elegido el mismo cuadro que yo pero le habías dado otra interpretación, todos incluso tú. Y tenía ganas de leerlo. Me gusta el diálogo y cómo cobran vida los personajes de la escena a través de él. Un beso.
ResponderEliminarBendita Inocencia.
ResponderEliminarEl Aya,enseñando.
La chica aprendiendo.
Y tu, con tus 100 palabras.
Todo el mundo contento.
Un beso
Qué puedo decir que no te hayan dicho, coincido con todos los comentarios.Me resta tan solo felicitarte por el cuadro y el diálogo con el que le has dado vida. Casualmente llegué aquí y ahora, no pudiendo dejar de saludarte.
ResponderEliminarUn abrazo.