Llego a la antesala del tutor. Me siento y te extraño. Ahora
que no estás y no sabes que estoy, te quiero en silencio, cuando no me esperas.
Amo tus pequeñas cosas; el gesto de contrariedad que evitas poner, aquella tarde
que te pedí que te quedaras, y lo hiciste; lo generoso de tu entrega... Te miro
cuando no me miras, te observo y me pregunto cuánto te quiero. Todo, pero a mi
manera, sin obligación de decírtelo. Te quiero querer en silencio, quedito, sin
alharacas. Te lo digo con mis ojos cuando no me ves.
Se abre la puerta.
Fabián Madrid
Más Tutores y
tutorías en el blog de San.
Me ha gustado cómo has descrito el momento.
ResponderEliminar¡Hola! Precioso relato. Muy bien descripto el sentimiento y el momento que pasa. Me encantó eso de querer en silencio.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Se echaba en falta tu prosa. Un año es demasiado tiempo, pero me alegra el reencuentro.
ResponderEliminarSaludos.
A veces la mirada dice màs y quien la recibe, siente màs
ResponderEliminarMe ha gustado la cadencia de tu relato, es tan bello.
Un beso, Fabiân
Como dice Juan, un año de silencio es mucho tiempo, pero ya están aqui tus cien palabras, para leerlas y para sentirlas.
ResponderEliminarPrecioso Fabián.
Muchas gracias por participar y acudir a la llamada.
Besos amigos.
Tierna historia de un amor que aparenta ser imposible ante los ojos de los demás, ya que las formas deben guardarse entre tutor/a y discipulo/a
ResponderEliminarCasi como un amor prohibido...lo describes de una forma preciosa y magistral, muy bueno, besos.
ResponderEliminarMagnífica la forma y la inspiración. Un texto que se lee con la sensación de que se ha parado el tiempo por un unos instantes.
ResponderEliminarUn beso.
Me parece muy tierno tu relato, Fabián, me ha encantado.
ResponderEliminarUn beso.
Entiendo que es una historia de amor,pero no sé si la entiendo bien. Parece que el tutor está enamorado de su alumna, aunque no se lo quiere decir tal vez porque es menor y sería un amor prohibido...así lo veo yo. En cualquier caso, es un bello texto, lleno de sentimiento.
ResponderEliminarUn placer leerte de nuevo!
Un beso
Amor sin esperar nada a cambio, en silencio y así se conforma.
ResponderEliminarUn abrazo
Tal vez por el mal concepto que tenemos de esa clase de tutores me resulta inquietante esa entregadel protagonista, esta historia puede tener una continuación muy dura.
ResponderEliminarO no.
Un abrazo.
Me encanta, Fabián! Me encanta, me encanta, me encanta!
ResponderEliminarbeso!
Que tutor más cariñoso. Uno asi de meloso y atento es lo que me haría falta. Con lo que me gustan que me mimen!!! cortito tu relato pero muy intenso. Saludos muy cordiales, amigo Fabián.
ResponderEliminarEncantador texto. Veo un amor romántico, prohibido, platónico. Muy original.
ResponderEliminarBso
Los he leido a todos uds
ResponderEliminarlos felicito
no es nada facil escribir sobre lo que el otro propone