Desde la ventana de mi patio vi una niña dibujando en los
cristales. Escribía y borraba echando vaho sobre los cristales.
Detrás de ella, los que parecían ser sus padres, discutían
con grandes aspavientos, gestos, y caras
muy violentas. Entonces caí en la cuenta de que eran la pareja de sordos que
vivía en la otra escalera. Lo que no sabía era si la niña era oyente o no,
porque siempre se inclinaban los padres cuando nos cruzábamos en el portal.
Saludé
a la niña. Se paró. Y al levantar la cara vi una lágrima que corría por su
rostro.
Fabián Madrid
Más ventanas en el
blog que da a La Plaza del Diamante
Preciosa imagen y precioso comienzo de historia, esa niña dibujando en los cristales, pero que final tan triste, la niña sí que era consciente de esas discusiones de los padres, aunque estas fueran a traves de los gestos.
ResponderEliminarMe gustó como siempre tus cien palabras.
Besos.
La tristeza y la desesperanza no entiende ni discrimina ni por edad ni capacidades. Hermosa imagen! Un abrazo
ResponderEliminarUna historia donde la protagonista la niña , quizás en silencio sufra los avatares de sus padres.
ResponderEliminarUn abrazo .
¡Hola! Qué triste relato, que ver pelear a los padres no es algo grato ya escuhes o no.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Agresión con las manos y gestos, lo mismo que las palabras, el resultado no puede ser peor que esa làgrima derramada.
ResponderEliminarUn beso, Fabiàn
En esa última lágrima de la niña, se condensa toda la tristeza de este bello relato.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Saludos.
Triste historia que deja huella para toda la vida.
ResponderEliminarUn abrazo Fabián.
Esa teoria que decia que los niños no se enteraban....y es que las discusiones continuas sean a gritos o a gestos siempre causaran dolor en los más pequeños. Un relato bellisimo, besos.
ResponderEliminarDa ganas de que siga la historia.el misterio de tener vecinos totalmente silenciosos.
ResponderEliminarey! qué triste!y qué perfecto resúmen!
ResponderEliminaraplauso, fabián!
Ser testigo silencioso, es como una mala broma para esta niña...
ResponderEliminarUn Beso!!
..ella escribía " Ya basta." y borraba y ponía de nuevo
ResponderEliminarMe gusta la sencillez de tu relato conmovedor. El observador parece que solo lo fuera de la pelea de los padres, pero es mas testigo de la tristeza de la niña
ResponderEliminarAbrazo juevero Fabian
Una historia completa en pocas palabras.
ResponderEliminarUn beso
Una historia completa en pocas palabras.
ResponderEliminarUn beso
La lágrima de esta niña me duele solo con leer tu relato. Los hijos de lso padres separados o en trance de separación, estan al tanto de todo, porquè han de oir muchas discusiones y peleas.
ResponderEliminarUn tema duro, amigo Fabián. Un saludo cordial.