Cuanto tiempo hace… Yo te perseguía con mis halagos, intentaba
hacerme visible, y tu sin percatarte de que existía. Accidentalmente aparecía
en tu camino, me ofrecía a lo que hiciera falta, pero nada, tú nunca
necesitabas nada.
Por fin encontré algo que te venía bien, una máquina que me
haría acercarme mucho; podría ser como una máquina del tiempo que me sirviera
de túnel, para aproximarme, para hacerme visible, que me podría llevar hasta
ti. Me habían dicho tus amigas que necesitabas ese artilugio en tu vida. Por
fin podría verte, hablar contigo, explicarte.
Por fin vendrías a mi sex-shop.
Fabián Madrid
Más máquinas en el blog de Alberto V.
Una máquina del tiempo para seducir a una mujer, que recurso interesante.
ResponderEliminarEn un sex shop podría ser útil, para conocer a Paulina Bonaparte, Thais de Corinto, Aspasia de Mileto, etc.
Hombre, los hay que les gusta cada cosa; pero bueno si les va bien para sus fines, bien está.
ResponderEliminarUn abrazo
<máquinas del tiempo para todo, eso funcionaría...
ResponderEliminarPara conseguir ciertas cosas, hay que apelar a cualquier recurso, me parece jejeje
ResponderEliminarJa, ja...desde luego a tu relato no le falta originalidad! Nunca es tarde si la dicha es buena...
ResponderEliminarTe lo has tomado con humor, bien hecho. Entrar al sex shop a través de la máquina es una idea buena, hay gente que se avergüenza al entrar y salir por aquello de las miradas indiscretas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Te lo has tomado con humor, bien hecho. Entrar al sex shop a través de la máquina es una idea buena, hay gente que se avergüenza al entrar y salir por aquello de las miradas indiscretas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Desde luego, gracias a la dichosa máquina ella entraría en tu sex shop y rompería todo su pudor para buscar uno de los mejores consoladores o artilugios placenteros diversos. Creo que las que hicieron de máquina del tiempo fueran las amigas. Volverá a sentirse joven.
ResponderEliminarUn abrazo Fabián, y gracias por haber participado.
Desde luego, gracias a la dichosa máquina ella entraría en tu sex shop y rompería todo su pudor para buscar uno de los mejores consoladores o artilugios placenteros diversos. Creo que las que hicieron de máquina del tiempo fueran las amigas. Volverá a sentirse joven.
ResponderEliminarUn abrazo Fabián, y gracias por haber participado.
Es un viaje al presente, algo así como cruzar la calle y pafff... de todos los colores, tamaños, olores y el resto viajaría por sí solo.
ResponderEliminarAbrazos
No sé muy bien si utilizaría la dichosa maquinita del tiempo o el sex-shop haría esas funciones de atracción tan deseada. Cuando los acercamientos se presumen imposibles, tender puentes puede ser una buena solución.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Comienza tu texto de una forma y termina dando giros, hacia esa máquina puente para el encuentro. Si para estar cerca este es el camino, no se puede desaprovechar la ocasión ni el momento.
ResponderEliminarBesos.