Este jueves… adiós la luz

Pasé a ver a mi vecina para aclararlo todo. No podía dejar que los demás vecinos, y sobre todo las demás vecinas, por una postura equivocada –por mi parte con toda la intención del mundo– se pensaran que aquella tarde había pasado algo. Marta, la de enfrente, tan recatada y tan poco dada a los excesos…, impensable…

Cuando acabábamos de sentarnos, mientras me ofrecía algo para tomar, se fue la luz. No te muevas que yo me encargo de todo, y lo hizo. No he vuelto a mi casa desde entonces. El problema es que llevamos veinte días sin luz.

Fabián Madrid

Más luces o sombras en el blog de Gus